"ABSOLUTAMENTE HEATHER" (MATTHEW WEINER)
Por Buscando mi equilibrio Absolutamente Heather, Matthew Weiner, reseña, Reseñas, seix barralPor si a alguien se le ha pasado este libro inadvertido, que lo dudo, ha tenido bastante polémica porque o ha encantado o ha decepcionado,...
Por si a alguien se le ha pasado este libro inadvertido, que lo dudo, ha tenido bastante polémica porque o ha encantado o ha decepcionado, sin medias tintas. Peeeero aquí estoy yo como excepción a la regla; adelanto que me ha gustado y también ha resultado excesivamente escueto. Es cierto que el hecho de que el autor del libro sea creador y guionista de "Mad men" y "Los soprano" pone el listón muy alto. Bajo el sello de Seix Barral aparece "Absolutamente Heather", la primera novela de Matthew Weiner.
Os cuento qué me ha parecido.
Comenzamos en Manhattan con Mark y Karen, quienes acaban de conocerse por mediación de amigos comunes. A priori ella solo quiere su dinero, de hecho es un tipo que no le cae del todo bien, circunstancia que cambia al percatarse de que está enamorada de él. Mark, por su parte, se siente atraído por su físico únicamente, hasta que también se enamora de ella, y .... ¡surge Heather! Su bienestar se convierte en el epicentro de estos padres, imagino que como cualquiera. La idolatran hasta el extremo de una ceguera permanente, y es que no se quitan el antifaz hasta que Heather alcanza su adolescencia. Es todo para ellos, cualquier barrera se supera en esta familia. O casi.
Nos encontramos también con Bobby, otro de los personajes estelares de esta historia. Hijo de madre soltera, es un niño que crece rodeado de los "amigos" de su madre; alcohólicos, drogadictos y maltratadores, entre otros. Comienza a acudir al colegio pero al llegar al instituto lo deja, y consigue trabajo en un almacén de madera.
Ojo, no os dejéis engañar por este chico. La infancia que ha tenido que vivir y que tiene clavada en el alma saldrá a flote reencarnada en una forma muy impúdica de expresarse.
La trama argumental concerniente a Bobby perturba, ya que se presenta sin florituras, directa y punzante; sin embargo, el personaje que más sorprende es Mark. En líneas generales, el perfil psicológico de todos los personajes es muy acertado e impactante, pero insisto, el que me dejó con la boca abierta fue el padre de la criatura.
La historia es breve, pero a medida que se va avanzando en páginas va complicándose poco a poco, y esto es lo que más me ha gustado del libro, que resulta impredecible. El autor nos otorga varios giros muy certeros que crean cierta inseguridad, es decir, tira por tierra todo lo que casi seguro habrías vaticinado, de forma magistral. Aquí se demuestra que el hombre tiene tablas.
Cada uno tiene sus propios demonios y nunca se puede confiar ni en la mente propia, porque ¿quién asegura cómo nos comportaremos ante ciertas situaciones?
En final es justamente lo que no me ha gustado. No me malinterpretéis, no porque no lo imaginaba, o no era lo que pensaba, al contrario; precisamente es otro punto destacable del libro, pero se me hizo demasiado corto. Me hubiese encantado un poco más de desarrollo en general, unas cuantas páginas más. A veces hay ladrillos a los que les sobran páginas, y en esta ocasión, me han faltado.
Quién sabe... quizá termine adaptándose a guion de serie o película, y entonces le saque algo más de jugo.
"Bobby quiso contarle la verdad, que el mundo le recordaba a un zoo donde cada animal está encerrado con su propia mierda y que él se limitaba a mirar a aquellos animales con pena y curiosidad mientras se graznaban los unos a los otros."
La trama argumental concerniente a Bobby perturba, ya que se presenta sin florituras, directa y punzante; sin embargo, el personaje que más sorprende es Mark. En líneas generales, el perfil psicológico de todos los personajes es muy acertado e impactante, pero insisto, el que me dejó con la boca abierta fue el padre de la criatura.
La historia es breve, pero a medida que se va avanzando en páginas va complicándose poco a poco, y esto es lo que más me ha gustado del libro, que resulta impredecible. El autor nos otorga varios giros muy certeros que crean cierta inseguridad, es decir, tira por tierra todo lo que casi seguro habrías vaticinado, de forma magistral. Aquí se demuestra que el hombre tiene tablas.
Cada uno tiene sus propios demonios y nunca se puede confiar ni en la mente propia, porque ¿quién asegura cómo nos comportaremos ante ciertas situaciones?
"Recordó que al tragarse la hostia y el vino sintió que de verdad se convertían en algo en su boca, como el olor a humo después de quemar cocaína."
En final es justamente lo que no me ha gustado. No me malinterpretéis, no porque no lo imaginaba, o no era lo que pensaba, al contrario; precisamente es otro punto destacable del libro, pero se me hizo demasiado corto. Me hubiese encantado un poco más de desarrollo en general, unas cuantas páginas más. A veces hay ladrillos a los que les sobran páginas, y en esta ocasión, me han faltado.
Quién sabe... quizá termine adaptándose a guion de serie o película, y entonces le saque algo más de jugo.
¿ Lo habéis leído?